El Melanoma, es el tipo de cáncer de piel más común y también el más peligroso, ya que causa la mayor cantidad de muertes en el mundo. Ocurre en su mayoría por la sobreexposición a la luz ultravioleta (UV), radiación invisible que proviene del sol, las cámaras y lámparas solares.
En 2012 la incidencia mundial de Melanoma en hombres fue de 120 mil 649 y para mujeres de 111 mil 481. En cuanto la mortalidad por esta enfermedad en el mismo año fue de 31,390 en hombres y en mujeres de 24,098. En México la incidencia de casos tan sólo en el 2012 en mujeres fue de 884 y para los hombres de 1,147.
Estar muy expuesto a los rayos UV puede cambiar la textura de la piel, hace que ésta envejezca de manera prematura y que pueda desarrollarse el cáncer.
Algunos de los factores de riesgo para desarrollar ésta neoplasia son: tener piel clara, antecedentes familiares de cáncer de piel, la exposición al sol, quemaduras por el sol, el uso de las cámaras solares para broncearse, tener lunares.
Un cambio en la piel es el signo más común del melanoma, éstos cambios pueden ser desde lesiones, llagas o un cambio en los lunares ya existentes. Una forma de identificar irregularidades son las cinco primeras letras del abecedario.
- A: Asimetría, el lunar pueden tomar una forma irregular.
- B: Bordes, los bordes de los lunares son irregulares.
- C: Color, el lunar puede presentar diferentes tonalidades.
- D: Diámetro: Que el lunar sea más grande que una semilla.
- E: Evolución, el crecimiento del lunar en un corto tiempo (semanas).
Ante este panorama la Dra. Marissa González agregó: “En MSD, trabajamos incansablemente desarrollando terapias innovadoras que contribuyan en la lucha de los pacientes contra enfermedades como el cáncer. Día tras día en una batalla contra la adversidad los pacientes se convierten en héroes y nos dan grandes lecciones dignas de ser aprendidas. Por ello, la mejoría de la calidad de vida de los pacientes con cáncer es nuestra meta”.
Fuente: El Debate