Un par de calcetines que a simple vista es algo inofensivo, pero en realidad puede que no lo sean tanto, ya que una estudio a cargo de investigadores de la Universidad de Granada y el Hospital Clínico San Cecilio de la capital granadina, han encontrado restos de bisfenol-A y parabenos en 9 de cada 1o calcetines para bebés y niños entre 0 y 4 años.
El bisfenol-A y parabenos tienen actividades hormonales que están relacionadas con disfunciones que puede provocar diversas patologías a niños y adultos, pueden ir desde desde déficits de atención e hiperactividad a alteraciones genitourinarias, desarrollo sexual secundario prematuro y obesidad en los niños, a hipotiroidismo, infertilidad, diabetes y cánceres hormono-dependientes, como el de mama, en adultos.
Los investigadores alertan sobre la exposición de los bebés a través de la piel, pero también puede ocurrir por vía digestiva de estos compuestos químicos que se encuentran en la ropa, ya que los bebés suelen chupar con mucha frecuencia sus propios pies y por ende sus calcetines.
En la reconocida revista Environmental International fueron publicados los resultados de la investigación, ya que se realizó el análisis a 32 pares de calcetines comprados en distintos locales. En un local de bajo precio los calcetines alcanzaron un máximo de 3.736ng de bisfenol-A por gramo de calcetín.