Empiezan a saturarse albergues en Tijuana con el arribo de personas de origen centroamericano, las necesidades de comida y artículos de uso personal crecen.
Carlos es migrante hondureño, su esposa y 4 hijos montaron el tren “La Bestia” dicen que fue un milagro llegar a Tijuana.
La caridad de los mexicanos les permitió sobrevivir en esta dolorosa travesía, aunque en Tijuana la comida escasea.
Albergues de la zona norte Juventud 2000 y Las Viña Tijuana están en su máxima capacidad que en conjunto atienden cerca de 300 migrantes y con necesidades pues llegarán más camiones en los próximos días.
Fuente: xewt12