Con hedor que no soportan los sanduiguienos por millones de galones de aguas residuales provenientes de esta frontera, residentes de Imperial Beach ciudad del condado de San Diego se han visto afectados este verano llevando a una molestia internacional que podría ocasionar un derrama económica millonaria para mejorar el flujo de aguas contaminantes por parte de Baja California.
Sin duda quienes gozan del privilegio de hacer uso de su visa para ingresar al vecino Estado de California huyen este verano desde Tecate, Mexicali y Tijuana para arribar a San Diego que es un sitio popular por sus centros comerciales, malecones, cerveza artesanal, eventos de espectáculos y sus playas.
Pero por la colindancia que se tiene con Tijuana se ha dado a conocer por autoridades de Imperial Beach que las aguas residuales no tratadas de esta ciudad se lavaron a través de la frontera de San Diego-Tijuana el invierno pasado y el hedor fue tan penetrante que los propios residentes de Imperial Beach no podían salir de sus viviendas.
Dentro de las sustancias que han afectado a las aguas en la playa se identificaron desechos tóxicos y aguas residuales tóxicas siendo arrojados al Río Tijuana así como a largo de los cañones fronterizos, lo cual dijo el alcalde una violación a las leyes de aguas limpias
En cuanto al quehacer de las autoridades federales, estatales y locales en Estados Unidos, dijo se han comprometido en ayudar, pero insistió que para regular el flujo de aguas residuales que desborda el sistema de alcantarillado de Tijuana se requieren cientos de millones de dólares, lo cual no se ha dado con la inversión para mejoras en la infraestructura de Tijuana, concluyo el edil.
Con información de La Voz de la Frontera