Decomisa CBP 28 pericos y 3 gallinas en la frontera de Tijuana durante intentos de contrabando hacia EE. UU.
- CBP recordó al público que todas las especies de aves deben ser declaradas al ingresar a EE. UU., y que existen estrictas regulaciones para la importación de fauna.
En dos incidentes ocurridos en los puertos de entrada de Otay Mesa y San Ysidro, oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) decomisaron un total de 28 pericos y tres gallinas vivas que eran transportadas de manera ilegal desde México.
El primer caso tuvo lugar el 30 de abril en Otay Mesa, donde un hombre de 51 años fue sorprendido ocultando seis pericos vivos dentro de sus botas. Durante una inspección secundaria, los oficiales también encontraron otros seis pericos no declarados en el interior del vehículo, dos de ellos ya sin vida.
El segundo caso se registró el 4 de mayo en San Ysidro. Un hombre de 26 años, acompañado por pasajeros, fue detenido cuando oficiales descubrieron dos jaulas ocultas bajo una manta en la cajuela de su SUV. En una de ellas había 16 periquitos vivos y en la otra tres gallinas, todos sin declarar.
Las autoridades detuvieron a los implicados y los remitieron a Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) y al Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. (USFWS) para su investigación.
Las aves fueron puestas bajo cuarentena veterinaria por el Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA) para descartar enfermedades aviares que puedan poner en riesgo la fauna silvestre o el sector agrícola estadounidense.
Según Sidney Aki, director de Operaciones de Campo de CBP en San Diego, el tráfico ilegal de aves representa un riesgo grave para la salud pública, la economía y la biodiversidad del país.
“Las aves pueden portar enfermedades contagiosas que amenazan tanto a la vida silvestre como a las industrias agrícolas”, advirtió.
CBP recordó al público que todas las especies de aves deben ser declaradas al ingresar a EE. UU., y que existen estrictas regulaciones para la importación de fauna.
El incumplimiento de estas normas puede derivar en sanciones civiles o penales. Además, el contrabando de animales silvestres es un delito federal contemplado en las leyes de protección ambiental y sanitaria.