Un hombre hispano murió después de una sepsis que desarrolló cuando su herida de tatuaje sin sanar se infectó de nadar en el mar. El sujeto de 31 años no identificado no hizo caso del consejo dado a aquellos con nuevos tatuajes de esperar durante dos semanas antes de aventurarse en albercas u océanos.
En cambio, él decidió arriesgarse en las aguas calientes del Golfo de México solamente cinco días después de la obtención de su grabado. Pero ya que la herida aún estaba muy reciente, se contaminó con una bacteria carnívora que rasgó pedazos de su piel y en última instancia condujo a su muerte.
l día después de que fue a nadar, él desarrolló una fiebre, enfriamientos y una erupción roja cerca de su tatuaje, escribieron expertos. Su condición siguió empeorando durante los dos días siguientes, antes de que él tarde o temprano fuera admitido al hospital.
Los doctores estuvieron preocupados sobre los parches sobre sus piernas ya que se habían tornado púrpuras, factor que puede ser visto en muchas infecciones.
Ellos inmediatamente sospecharon que la bacteria vibrio vulnificus era la responsable, ya que el hombre había sufrifo de cirrosis, que fue causada por los hábitos diarios del hombre de beber seis botellas de 340ml de cerveza diariamente.
A causa de su hígado debilitado, él fue considerado en el alto riesgo de tener tal infección. Se cree que los pacientes con enfermedades crónicas de hígado tienen cantidades bajas de neutrófilos, glóbulos blancos importantes que ayudan a luchar contra los microorganismos.
Le dieron antibióticos para ayudar a luchar contra la bacteria mortal, que mata alrededor del 60 por ciento de los que la contraen. Dentro de solamente 24 horas de ser admitido en el hospital, los doctores lo colocaron sobre una máquina que se encargaba de mantenerlo vivo, cuando sus órganos comenzaron a fallar.
Ante esto su cuerpo sucumbió al choque séptico solamente semanas más tarde mientras él todavía recibía el cuidado, haciendo que sus riñones fallaran completamente.
Él murió dos meses después de ser admitido en el hospital.
Expertos señalaron que los artistas de tatuaje deberían impulsar a la gente a esperar al menos dos semanas antes de ir a nadar al mar o a piscinas, pero otros piden dar la herida un poco más de tiempo para sanar.