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Cuando todo parecía perdido, los Cargadores, comandados por la fe inquebrantable de su Quarterback Philip Rivers, vinieron de atrás y con un final memorable, donde consiguieron una conversión a falta de cuatro segundos, se llevaron el triunfo 29-28 sobre los Jefes para poner al rojo vivo la cima del Oeste de la Americana y asegurar su lugar en la postemporada.

Fue un final de locura, de esos que se llevan todos los reflectores. Los Cargadores se inventaron una serie memorable cuando el tiempo se agotaba y tras conseguir el touchdown que les daba la posibilidad de empatar, fueron valientes y con un pase de Rivers a Williams silenciaron un Arrowhead que no podía creer lo que veía.

Los Cargadores siempre remaron a contracorriente. Un primer cuarto en el que Patrick Mahomes les pasó por encima parecía ser una condena letal, insuperable, pero con base en empeño lograron mantenerse ahí, siempre cerca del milagro.

Y eso que no fue fácil, porque Philip Rivers nunca logró sentirse realmente cómodo dentro del ‘emparrillado’. Víctima de la presión de los Jefes, el mariscal tuvo que correr por su vida, y en el camino completó una actuación apenas buena, al pasar para 313 yardas, dos pases de anotación y dos intercepciones, pero suficiente para superar lo hecho por Mahomes, que no fue poco.

Sin Keenan Allen, quien se fue muy rápido del encuentro debido a una lesión, Rivers encontró en las manos de Mike Williams y en las piernas de Justin Jackson su deshago perfecto. Al final, los Cargadores se quitaron un peso grande de encima, al derrotar a un equipo al cual no le ganaban desde hace nueve partidos.

Los Jefes deberán levantarse rápido de una derrota dolorosa, de esas que pueden tumbar los ánimos de cara a la postemporada. Patrick Mahomes, quien terminó con 243 yardas y dos pases de anotación, tuvo un gran comienzo, sin embargo, no pudo mantener el ritmo durante los últimos cuartos, en los que se vio impreciso y presionado. Damien Williams, quien suplió al lesionado Spencer Ware, lo hizo de buena forma, al entrar dos veces a la zona prometida.

A falta de dos partidos, ambos equipos tienen una marca de 11-3.

Fuente: ESTO