Un pequeño de tres años quedó atrapado dentro de un vehículo en llamas; Oliver, como le llamaban en vida, se encontraba abordo del vehículo estacionado afuera de una estancia infantil en el Parque Industrial de Otay en Tijuana.
Autoridades informaron que la abuela estacionó el vehículo para recoger a su hermano; bajó del vehículo y dejó al niño dormido en la silla dentro de la camioneta Jeep, Grand Cherokee.
Pasaron alrededor de 5 minutos desde que bajó del vehículo hasta que se percataron de que el vehículo se estaba incendiando, pero ya no podían acercarse a intentar rescatar al menor.
Al llegar los bomberos encontraron al pequeño calcinado.
Hasta el momento no hay detalles sobre qué fue lo que ocasionó el incendio de manera tan abrupta; y por el momento continúan los trabajos periciales y de investigación en la escena.