La Escala de Richter se dejó de utilizar en 1986 y desde entonces los movimientos telúricos se miden de acuerdo a su magnitud, indicó la jefa del Servicio Sismológico Nacional (SSN), Xyoli Pérez Campos.
La escala sismológica de Richter fue desarrollada en 1935 por el sismólogo estadounidense Charles Francis Richter y aunque la mayoría de los sistemas actuales de medición de movimientos telúricos siguen alineados a ella con el fin de facilitar la comparación de temblores actuales con los del pasado, esta ya es obsoleta.
Además, dicha escala fue diseñada para medir los sismos que afectaban las ciudades de California y como cada zona se comporta de manera diferente, hacen falta nuevas formas de medir la energía liberada por el reacomodo de las placas tectónicas de la Tierra.
Por eso decir que un sismo fue de “equis grados en la escala de Richter” es incorrecto.
Lo correcto es decir que un sismo fue de magnitud 7.1 o la cifra que se le asigne, indicó la especialista durante una entrevista para la agencia noticiosa Notimex.
Además, medir un sismo solo por su magnitud no determina exactamente su poder destructivo pues hay factores como la intensidad, profundidad y distancia del epicentro que logran crear una imagen más detallada de la energía liberada por uno.
En México hay aproximadamente una veintena de formas de calcular la magnitud de un sismo, pero hay una diferencia entre magnitud e intensidad.
La jefa del SSN puso de ejemplo el seísmo del 19 de septiembre del año pasado, que emitió menos energía y fue más pequeño que el del 7 del mismo mes, pero que provocó más daños en la Ciudad de México debido a que el epicentro se encontró mucho más cerca de esta.
Además, la naturaleza lacustre de gran parte de la ciudad tiene un efecto magnificador de la violencia con la que se sacude la tierra durante un temblor.
“Si la gente dice que fue (el del 19 de septiembre) más fuerte que el del 7 de septiembre o que el del 85, tiene razón en su percepción; sin embargo, fue más pequeño en tamaño y en energía liberada”, explicó Xyoli Pérez Campos.