Hombre violó y asesinó a una niña, él está al borde de la muerte por ataque de dos prisioneros
El asesino Roy Whiting quedó empapado en sangre y luchando por su vida después de sufrir un ataque violento en la cárcel en la que cumple su pena por asesinar a Sarah Payne, un caso que conmocionó a Gran Bretaña.
Whiting, de 59 años, que fue condenado a cadena perpetua en 2001 por secuestro, violación y asesinato de Sarah Payne, de ocho años, fue atacado en su celda, en la prisión de Wakefield, por dos asesinos convictos.
Fue llevado de urgencia a un hospital en estado crítico con varias puñaladas en la parte superior del cuerpo, y los médicos de la cárcel temían por su vida. Sin embargo, la rapidez de los funcionarios de la prisión y el personal sanitario salvó al asesino.
Whiting estaba en su celda cuando fue atacado por los otros reclusos . Una fuente dijo a The Sun “Si Whiting hubiera sido apuñalado en la calle, podría haber muerto. Debido a que estaba en prisión, todas las alarmas se activaron y lo llevaron al hospital en cuestión de minutos. Es una prueba de la profesionalidad del personal involucrado”.
Esta es la tercera vez que Whiting ha sido atacado en prisión desde que fue encarcelado en 2001. En 2011, el doble asesinado Gary Vinter apuñaló a Whiting con el mango afilado de un cepillo de inodoro. En enero de 2016 fue golpeado. El asesino Rickie Tregaskis cortó la cara de Whiting, dejándolo con una cicatriz en la mejilla derecha en 2002.
Sarah Payne estaba jugando al escondite con su hermana Charlotte y sus hermanos Luke y Lee en un campo de maíz cerca de la casa de sus abuelos en Kingston Gorse, el 1 de julio de 2000 cuando cruzó una carretera y no la volvieron a ver. Al otro lado de la carretera estaba Whiting, quien la arrojó a su camioneta, saludó y sonrió al hermano de Sarah, Lee, que tenía 13 años entonces, mientras se la llevaba.
Fuente: ABC